MANJARES RAROS DE LA MESA GRANDE

Es nieve cuarzo en la mejilla joven

el ángelus
cae
entre los tarros de arcilla
y ahí revolvemos la mano
jugos molidos en la misma piedra
todos machacan la misma sal
tan poca y transparente

Es nieve perla entre los senos pardos

curubas estiradas y amorosas
manjares raros de la mesa grande
los tuyos
los míos

Karelyn Buenaño
2014 

SODA

                                  

                   Un pecho solitario eS una telaraña

                          encapullandO

            mientras el gran tejeDor

                       se chupa el díA

Karelyn Buenaño.

ALEGRÍA

uno

dos
uno
dos
alegría uno
alegría dos
sonrisa arriba
sonrisa abajo
el pecho al frente
a estirarse fuerte
uno 

dos 

uno
dos
y no hay quien pueda
evitar caerse
para hundirse   y antes

de volver arriba

levantar a otro hundido.

Karelyn Buenaño

(2014).

NOZAROC

La paciente sigue sus recomendaciones de cómo saltarse la cola y hacerse la lánguida, sin importar si otros moribundos de vieja data necesitan al doctor mucho más que ella. Cuando le llega el turno para la consulta, se oprime el plexo con fuerza, y se da cuenta de que su nozaroc ya no funciona. Se siente orgullosa, aún es una actriz de primera tabla: ¡su sangre podía enrojecer si se lo pedían! Pero el cardiólogo Nozaroc ha saltado por el muro.

Los pacientes abandonan la sala alegremente.


Karelyn Buenaño.

SHAMELESS

Se pinta las uñas

como si el mismo Narciso

le hubiera sonreído en nacarado

el algodón

con acetona

reanima esa secreta actitud

de yegua

todavía altiva

querible

vigorosa.

Karelyn Buenaño.

INECUACIÓN APRENDIDA DE EDITH PIAF

Me desconsuelo porque no traes amor en tus manos. ¿Entonces quién lo traerá? ¿acaso puede traerse? Tal vez sea aquello que se reconoce precisamente por su inconsistencia. La suma de muchos amantes no es un amor grande como la gente piensa. El amor se convierte en un acto de creer en lo poco, de ver el sol en el candil. Es compasión de lo presente por lo único posible.


Karelyn B.